La
Sierra de Chicacnab, es la reserva con mayor cantidad de quetzales en Guatemala,
ubicada en las montañas de Caquipec Alta Verapaz, a una altitud de 2,500
metros. No hay luz ni acceso vehicular, solo un camino escarpado
para llegar a la comunidad a través del bosque nuboso prístino. El camino a
Chicacnab empieza en San Lucas en la base de la montaña. Hay mucho frío y el
clima es normalmente húmedo.
La comunidad de Chicacnab se ha organizado para acoger en sus hogares a turistas interesados en tener un contacto directo con la naturaleza. De hecho, esta sierra tiene la mayor densidad de quetzales en Guatemala y quien la visita puede caminar por el bosque, observar éstas y otras aves, orquídeas, bromelias, monos aulladores, coches de monte, el tucán esmeralda y el jaguar. También ver cómo se realizan los cultivos y se trabaja en la elaboración de tejidos, canastos y velas de arrayán.
El turista que quiera vivir esta experiencia debe comunicarse con el Proyecto Ecológico Quetzal y deberá convivir con una familia Q'eqchi' en sus casas que son muy básicas, con paredes de madera y un piso de tierra, y como de costumbre siempre hay un fuego encendido dentro de la casa para cocinar, también podrá degustar su comida típica y sus costumbres, y luego será introducido al bosque vírgen donde tendrá la oportunidad de observar al ave nacional en su hábitat natural.
La comunidad de Chicacnab se ha organizado para acoger en sus hogares a turistas interesados en tener un contacto directo con la naturaleza. De hecho, esta sierra tiene la mayor densidad de quetzales en Guatemala y quien la visita puede caminar por el bosque, observar éstas y otras aves, orquídeas, bromelias, monos aulladores, coches de monte, el tucán esmeralda y el jaguar. También ver cómo se realizan los cultivos y se trabaja en la elaboración de tejidos, canastos y velas de arrayán.
El turista que quiera vivir esta experiencia debe comunicarse con el Proyecto Ecológico Quetzal y deberá convivir con una familia Q'eqchi' en sus casas que son muy básicas, con paredes de madera y un piso de tierra, y como de costumbre siempre hay un fuego encendido dentro de la casa para cocinar, también podrá degustar su comida típica y sus costumbres, y luego será introducido al bosque vírgen donde tendrá la oportunidad de observar al ave nacional en su hábitat natural.